lunes, 15 de marzo de 2010

Sé que volverás


Soledad, por único acompañamiento. Una canción de Springsteen y su vieja E Street Band. Luz tenue, colores pálidos y cálidos a la percepción. El marco ideal y tiempo suficiente para encontrarte. Estoy relajado, sin prisas ni urgencias; a solas con mis pensamientos.

Comienzo a buscarte en lo más recóndito. Tengo ganas de tí y sin embargo, al llamarte, te vas alejando. ¡No huyas, no te haré ningún mal; sólo quiero que charlemos!. Cara a cara, sin cortinas que oculten nuestras vergüenzas.

No quiero presionarte. Sé que eres delicada, de actos espontáneos, sin premeditación aunque a veces, con demasiada alevosía. Debo encontrarte, por miedo a perderte.

La tristeza que ahora siento, me acerca a tí aunque esta vez, te muestras remisa, ausente; como si tu corazón perteneciera a muchos otros. No siento celos, aunque sí una ligera rabia contenida.

No quiero forzar más la situación. Te deseo lo mejor, y por ello desisto. Por hoy, desisto de tu compañía, de tu sonrisa, de tus lágrimas a punto de aflorar, de tu luz, de tu calor, de tu abrazo consolador. Por hoy, desisto, pero mañana prometo volver a buscarte si no eres tú la que en un espontáneo acto de bondad, me sorprendes y tapándome los ojos me preguntas ¿quién soy?.

Hasta mañana; es hora de buscar mundos más cercanos, mi querida, mi añorada, mi escondida inspiración.

8 comentarios:

  1. Bellísimo... A los poetas del cibermundo nos suceden estas cosas, imposible decirlo mejor que tú. Un abrazo maestro

    ResponderEliminar
  2. Qué puedo decir. Viniendo este elogio de quien viene, no puedo sentirme más orgulloso. Muchas gracias Miguel. Esto es una inyección de moral y de "inspiración"...jeje

    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  3. Bueno, yo diría q nunca se alejó de ti...

    ResponderEliminar
  4. Puede que en ocasiones, juegue al escondite conmigo. Gracias Sara por tu comentario.

    Un beso

    ResponderEliminar
  5. Me quito el sombrero, en esta vida estamos rodeados de música aunque a veces no la oigamos y personas como tú ponen la letra.

    Miguel Ángel Mesa

    ResponderEliminar
  6. Gracias Miguel. Comentarios como estos, me animan para seguir escribiendo.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  7. Vaya, yo diría que la inspiración no tiene escondites para ti. Un texto muy bueno, Luismi.
    Besos!

    ResponderEliminar
  8. Como siempre, mil gracias Mónica. Leyendo a mi pequeño círculo de amigos blogeros, la inspiración rapidamente vuelve.

    Besos

    ResponderEliminar

Se agradece siempre tu compañía y opinión. Este blog sería un algo en la nada sin comentarios.
Gracias

La hora de los buenos

  No hay mayor silencio que el silencio del olvido. Y no quisiera ser yo quien pasara de puntillas sin opinar por la historia más reciente d...