Para todos aquellos que todavía sienten el síndrome postvacacional, o simplemente se encuentran agobiados, os recomiendo seguir esta terapia.
Que tengáis un buen fin de semana.
Camino entre el gentío de un centro comercial. Seres todos como yo que en un mar de gentes buscamos esa oferta, esa ganga o esa necesidad ...
jaja...jaja...Mira la primera parte yo de seguro la necesito con...jaja
ResponderEliminarUn abrazo, muy bueno el video.
Gracias Taty. Buen fin de semana.
ResponderEliminarjajajaj... Buenísimo Luismi, jajajja... por desgracia, no tengo ningún jefe al que asestarle, a no ser que me la de a mí mismo, pero descuida, que candidatos sobran... Un abrazo compadre!!
ResponderEliminarEso de ser tu propio jefe, no debe ser mala experiencia. Yo aunque sí que lo tengo, no me puedo quejar en absoluto. Más que jefes, tengo amigos.
ResponderEliminarUn abrazo maestro
Llegaremos a esta tesiura :-) Al tiempo.
ResponderEliminarMe he reído mucho. Gracias!!
Espero que no lleguemos a eso Ana, porque los jefes lo van a pasar muy mal, jeje.
ResponderEliminarUn abrazo
Anigo Luismi tu eres una gran terapia y gente como tu hacen que esta vida y mundo bloguero tenga sentido, por eso vuelvo, con un blog nuevo desde cero, aqui te lo dejo con todo mi cariño:
ResponderEliminarhorizontedormido.blogspot.com
un fuerte abrazo
Querido amigo: me acabas de alegrar un nuevo día. No podía faltar por este mundillo una persona con la sensibilidad que has demostrado siempre. Me alegro enormemente de tu vuelta y rapidamente me paso por ese nuevo horizonte.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Luismi, esas terapias tienen toda la pinta de ser mano de santo. Deberían al menos dejarnos probar, jaja.
ResponderEliminarBesitos!
Yo con mis jefes, no. Pero tengo algunos candidatos, con los que iría a más de una sesión, jeje.
ResponderEliminarBesos
Esta terapia es un prodigio, hace milagros.... por suerte no es mi caso, pues creo que tengo uno de los mejores jefes del mundo: considerado, amable, dispuesto, colaborador, amigo, inteligente... tengo mucha suerte, pero en caso contrario, seria interesante poner en pràctica esta terapia. Muy divertido. Un beso.
ResponderEliminarPues hasta en esto coincidimos. Yo no tengo un jefe. Tengo un amigo y me considero afortunado de trabajar en un ambiente tan excepcional.
ResponderEliminarBesos.