lunes, 30 de mayo de 2011

Bonus track

Hay días en los que uno se levanta por la mañana con una sensación de normalidad rutinaria. Puede ser un martes, jueves o sábado sin otra perspectiva que la del paso del tiempo hacia un nuevo día o el comienzo de un nuevo fin de semana sin más.

Pero el pasado sábado, no fue así. Unos de esos días en los que al abrir los ojos, piensas que al menos hoy, necesitas desconectar por un tiempo de los problemas, ansiedades y sinsabores que frecuentemente hacen de nuestra vida un camino cuesta arriba.

Uno de esos días en los que buscamos la familia, los amigos, las risas, la complicidad de la alegría.

Así que con ese pensamiento y predisposición acudimos tres de cuatro al encuentro de la buena música, de los buenos amigos y de la buena gente.

La excusa, un nuevo concierto de El Desván del Duende; la realidad, el reencuentro con gente cercana, con gente amiga.

Apoyado en una columna y con una copa en la mano, me dediqué a observar cómo el arte, la música y las buenas vibraciones transmitidas desde el escenario, contagiaban a los que allí nos habíamos reunido. Tarareé sus canciones y entre palmas, fotos y alegría, me sentí dichoso de ver como mi novia de siempre y mi media vida con sus primeros dieciocho años a cuestas, bailaban y reían entre "Pinchitos", "Macetas de colores" y "Señales de humo", que hicieron que los días no fueran aburridos. Me acordé mucho de mi otra media vida, que no pudo asistir, porque la cultura sigue vedada para ciertas edades.

Pero estos conciertos siempre llevan aparejado a modo de bonus track, un tema de larga duración que sin ser publicado, me parece una verdadera obra maestra.

Yo a este tema lo podría titular como "El encuentro" o "Entre amigos".

En ese encuentro, se reparten saludos, abrazos, charlas y mucha, mucha risa, bañados y aderezados por litros de rubia cerveza.

Rodeado de mujeres guapas por fuera y por dentro y de hombres más guapos por dentro que por fuera, la velada se hace corta, aunque lo que comienza siendo noche, acabe con luz de día.

Nunca me gustaron las espadas, pero allí llegas a sentirte mosquetero, porque da la impresión de que somos todos para uno y uno para todos. Y no se miran ni edades, credos, procedencias, ni condiciones. Disfrutar del momento es lo que cuenta.

Y una niña que ahora es adulta por ley, abre mucho los ojos con la perplejidad que le produce el ver a sus padres disfrutar como maduros adolescentes.

Y doy gracias a todos porque aunque el paso del tiempo nos tiñe de canas, en cada encuentro, perdemos años.

Y recuerdo al amigo, recuerdo al poeta que mirándome me dijo:

                                        "Se te ve feliz"

Y brindando con él sólo pude decirle con lágrimas al borde del precipicio:

                      " Lo necesitaba, amigo, lo necesitaba "






16 comentarios:

  1. Un placer compartir momentos especiales con vosotros... Lo pasamos realmente bien. Besos y mordiscos !!

    ResponderEliminar
  2. Gracias Jorge. Hasta un próximo encuentro.

    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Se nota que lo pasaron "de miedo" como decimos por éste lado de la tierra, es algo así como maravilloso...Cuando se comparte la edad pasa a segundo plano, de todos se aprende y con todos se fluye.
    Un abrazo Luismi.

    ResponderEliminar
  4. Simplementeyo:
    Que día tan especial, me alegro que disfrutaras de él y que tuvieras tiempo de pensar en ese pasado tan reciente.

    Cuando compartes este tipo de cosas con personas que te importan, es aun más especial y cuando vas camino de casa continuas con una sonrisa imperecedera. Genial

    ojalá todos los días fuesen así.

    Un besazo :)

    ResponderEliminar
  5. Hola luismi...la verdad es que esos sinsabores diarios se desvanecen cuando estamos reunidos de gente guapa, de gente que entiende la misma cultura que tú. A mi me encanta estar reunida con amigos...uno suelta una parida, otro otra y así se pasan la horas a base de risas y charlas.
    Me alegro que lo hayas pasado genial.

    Un beso

    ResponderEliminar
  6. Querida Taty: esa expresión de pasarlo de miedo, también la usamos por aquí. Yo el sábado te diría que más que de miedo, lo pasé terrorificamente bien. Y efectivamente, al charlar con gente tan diversa, se comparte y se aprende mejor que en cualquier escuela.

    Un beso amiga.

    ResponderEliminar
  7. Simplemente... muchas gracias. Aún hoy continúo con ese buen sabor de boca que traía camino a casa después de esta reunión entre amigos. Si todos los días fuesen así ¿verdad?. Pero bueno, con los malos momentos, estos otros se disfrutan aún más.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  8. Amiga Inma, estas reuniones entre amigos se saborean sobremanera. Y más aún cuando hace bastante tiempo que no los ves. Y además conoces nueva gente con la que seguramente volverás a coincidir y volver a compartir charlas y mucha mucha risa.

    Un besote.

    ResponderEliminar
  9. Un día así es como una inyección de vida, no solo nos rejuvenece sino que además queda grabado a fuego. No hay edades para disfrutar, para dejarse llevar por el momento. Es curioso como nuestros hijos alucinan cuando nos ven disfrutar como “maduros adolescentes”, sus ojos se desorbitan piensan que nunca hemos sido jóvenes o que los padres no sabemos divertirnos. Y eso que no te suelten un: Mama…compórtate por favor, je je. Un bessito

    ResponderEliminar
  10. Querida Men, hasta ahora nunca me han tenido que decir eso, pero si dentro de diez años me lo tienen que decir, tampoco será mala señal. Significará que seguimos siendo jóvenes. ¿No te parece?

    Un besito.

    ResponderEliminar
  11. Luismi,quiero agradecer personalmente la felicitción en el blog de Respi.
    un millón de gracias.
    Besos.

    ResponderEliminar
  12. No hay por qué darlas Morgana. Ha sido muy merecido el premio.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  13. Son reuniones increbles, veo que lo has pasado de película con emociones a flor de piel...

    yo lo hago muchas veces en el pueblo

    se ve un ambiente.. genial.. distendido y sano..

    y esta musica.... ummm que rica..

    la amistad tiene eso que llena el corazón.. de amor..

    Besos

    ResponderEliminar
  14. Fue increible Estrella. Espero que algún día puedas participar tú también de una de estas reuniones entre amigos. Ya sabes que invitada estás.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  15. Enorme Luismi, simplemente enorme... Gracias por seguir ahí, aguantándonos a tu manera, jejjee... Un fuerte abrazo amigo.

    ResponderEliminar
  16. Gracias siempre a vosotros porque lleváis la alegría, el arte y el cariño por donde vais.
    Un orgullo ser amigo vuestro.

    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar

Se agradece siempre tu compañía y opinión. Este blog sería un algo en la nada sin comentarios.
Gracias

La hora de los buenos

  No hay mayor silencio que el silencio del olvido. Y no quisiera ser yo quien pasara de puntillas sin opinar por la historia más reciente d...