martes, 23 de octubre de 2012

Sólo dos letras





En un rincón, acurrucada, amedrentada, incomprendida y olvidada, casi no se atreve a salir.

Muchos le hicieron daño. Muchos fueron los que se alejaron de ella y ninguno se atrevió a mirar atrás mientras la abandonaban sin piedad.

¿Qué mal causó? Sólo quiso hacer el bien. Sus ojos vidriosos aún esperan una mano amiga. Alguien que llegue a comprender entre tanta incomprensión.

De nada sirvieron sus súplicas. Sus llamadas dejaron de ser escuchadas y  toda su grandeza, toda su bondad, acabaron en el ocaso del olvido.

La dulzura de sus palabras, dejaron de calar hondo en el corazón del hombre.

Un hombre demasiado ocupado en sí mismo. Un hombre perdido en el egoísmo, la egolatría, la política, el dinero.

Un corazón de piedra escudado en sus propios miedos que no quiere dejar pasar nada que se engalane con el vestido de la humildad.

Por eso la abandonó. Mil excusas le bastaron para no fiarse de ella y prefirió dejarla al margen de su existencia.
Pero ella, aún siendo abandonada, siempre encontrará un momento de perdón, de reconciliación, de cobijo en su regazo. Porque su luz, nunca se apaga y su casa siempre permanecerá abierta.

Y hoy, en estos malos tiempos que nos ha tocado vivir, más que nunca, necesito cobijarme en ella. Necesito su calor, su tierno abrazo.

Y sé que esas dos manos que ofrezco, las apretará con fuerza, me mirará a los ojos y una luz de esperanza se reflejará en ellos.

Porque la fe, con todas sus caras, es así. Sólo dos letras que irradian una luz entre tanta oscuridad.

12 comentarios:

  1. Ufffff, entre tus palabras viajaron miles de imágenes a mi mente.
    Con cuantas me he identificado...

    Sin palabras... Pero con muchos recuerdos.

    Besos

    ResponderEliminar
  2. Espero que ese viaje haya sido de imágenes que puedas haber visto más allá de tus ojos.

    Besos

    ResponderEliminar
  3. UUFF!! Palabras espesas y de gran peso sentimental. A ver quien se identifica con este montón de emociones... Supongo que existe ese alguien...por algún rincón lejano o cercano a ti, de lo contrario no hubieran nacido esas dicciones
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  4. Dos palabras que pasan desapercibidas. Necesitamos creer en algo, la fe es la fuerza de la vida y como decía Sartre, La fe, incluso la profunda, nunca es completa.

    Buena entrada y no sigas buscando lo que no has perdido. :-)

    ResponderEliminar
  5. Pues sí Maruxela, existe ese Alguien. Un abrazo muy fuerte.

    ResponderEliminar
  6. Me hago el despistado Airblue; hago como que me pierdo, para luego encontrarme, jejeje.

    Besos

    ResponderEliminar
  7. Malos tiempos para ella,demasiados palos recibidos hace que la pierdas un poco, aunque en el fondo nunca se va del todo.Ojala sea valiente y no se apague nunca.Muy buena reflexion. Un bessito

    ResponderEliminar
  8. No creo que llegue a apagarse nunca. Siempre debe ser lo último en perderse.

    Besos y buen finde.

    ResponderEliminar
  9. La FE mueve montañas, es poderosa, por ello no debemos abandonarla ni perderla, pase lo que pase debemos aferrarnos a ella, por sobre todas las cosas.

    Besitos y abrazos alados, Luismi.

    Me encantaron tus palabras.

    ResponderEliminar
  10. Que entrada mas bonita
    Que oscura seria la vida sin Fe
    No dejes de escribir estas reflexiones

    ResponderEliminar
  11. Mi querida Diana, me alegra saber que tú también te aferras a esa Fe que tanta falta nos hace en estos malos tiempos que vivimos. Que no la perdamos nunca.

    Te deseo un maravilloso fin de semana.

    Un besote gordo.

    ResponderEliminar
  12. Amiga Yolanda; lo primero, gracias por tu primer comentario en este pequeño Café de encuentro entre amigos, en el que siempre serás bienvenida.

    ¿Qué te voy a decir yo de la Fe que no sepas tú ya? Al fin y al cabo, yo soy casi un recién llegado a ese sentimiento tan fuerte que más que buscarlo yo, vino a encontrarme a mí.

    Besos y abrazos para tí y toda la buena gente que te rodea.

    ResponderEliminar

Se agradece siempre tu compañía y opinión. Este blog sería un algo en la nada sin comentarios.
Gracias

Y vueltas y vueltas…

            Te movías al son de océanos de agua cristalina; yo te observaba con la mirada de quien bajo un asombro temporal, atisbaba un fin...