lunes, 21 de enero de 2013

Esa voz

Noches de insomnio, tardes de coche, transistor bajo una almohada y una voz en las ondas.

Una voz inconfundible; una voz de ayer, de hoy, de siempre.

Entrañable como pocas, con sabor añejo; una voz amable, una voz amiga.

Fiel compañera de mil victorias y de alguna amarga derrota.

Parece que fue ayer y ya pasó un milenio. Pero esa voz no desfallece; su potencia inunda el ambiente, enmudece al que la escucha y despierta al más dormido.

Apenas me separan dos metros de esa voz, pero me transporta a miles y miles de kilómetros y a cien mil sueños de adolescente.

Y conmigo, también la escuchan aquellos que ya no están y vivieron con intensidad lo que este tipo de gafas sempiternas, de pelo coloreado en canas y recuerdos, de mirada profunda y sincera, sabe relatar como nadie.

A este tipo, que sin dejar de ser Don José siempre ha sido, es y será nuestro Pepe, gracias simplemente por ser esa voz.







En agradecimiento a Pepe Domingo Castaño y a todos los componentes del programa de radio "Tiempo de juego" de la cadena COPE por hacernos vivir una tarde inolvidable de radio, deportes y risas. A todos...


GRACIAS


13 comentarios:

  1. Que suerte tienen los que consiguen inspirar palabras tan bonitas y sentimientos tan profundos.
    Me ha gustado mucho tu dedicatoria ,querido Luimi.
    Nos vemos....

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  2. Querida Yolanda, te debo un café por tu primer comentario en mi querido blog. Muchas gracias por tus palabras.

    Besos y hasta pronto.

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  3. Bonita dedicatoria de homenaje y agradecimiento. Muchas voces han formado parte de nuestras vidas y nos devuelven a otras épocas.
    Sólo una cosa, cuando empieza a haber tanta nostalgia, no será que os estamos haciendo mayores?
    Lo digo por mi, no te vayas a molestar...
    Besos grandes. (por cierto tengo esta misma melodía en uno de mis blogs)

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  4. Siempre será una gran voz capaz de transmitir y emocionar.Me ha encantado la dedicatoria que le has realizado.

    Un Abrazo grande.

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  5. Querida Asun. Claro que no me molesto y tienes razón. Claro que existe nostalgia. Y es que para mí sí que hay tiempos pasados que fueron diferentes y mejores. No creo que por ser mayores sintamos nostalgia. Más bien esa nostalgia puede que nos lleve a ser más niños. Yo, al menos, es lo que intento.

    Un besote muy gordo.

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  6. Gracias Raelynn. Me alegra saber que te ha gustado. Realmente es un tipo que emociona sólo con su voz. Si encima lo conoces personalmente, esa admiración aumenta.

    Un fuerte abrazo amiga.

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  7. Genial la dedicatoria que has realizado a una de las grandes voces de este país, juglar de vítores y pachangas, que consigue transportar con su voz al oyente a un mundo paralelo.
    Precioso, un abrazo.

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  8. Muchas gracias Jorge. Coincido plenamente contigo.

    Un fuerte abrazo.

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  9. No sé los años que conozco esa voz, que la he escuchado y la escucho. Veo que le conoces, felicítale de mi parte y a ti por este bonito homenaje.

    La radio siempre será diferente.

    Un abrazo.

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  10. Sí, ahora con tu entrada me has hecho recordar la voz de Pepe Domingo Castaño y me alegra que hayas hecho este homenaje para trasladarnos en el tiempo hacia atrás.

    Me alegra que hayas conocido personalmente a Pepe ¿eres tú el que está a su lado verdad? jo, qué suerte tienes de haber estado cerca de él.

    Un beso.

    PD.- Me alegra que te unas a la iniciativa de pensamientos azules, da igual el día de la semana que sea, el caso es transmitir un día a la semana positivismo.

    Otro beso.

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  11. Hola María. Pues sí. Ese tipo que está con Pepe, soy yo. Claro que me uno a esa iniciativa. Que ya está bien de tantas malas noticias y mal rollo por el mundo. ¿no?

    Besos alegres y divertidos.

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  12. Pepe Domingo CAstaños, un crack en la ondas y seguro que tambien fuera de ellas...TAmbien es una de las voces de mi infancia, adolescencia y madurez...un abrazo a ambos

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Se agradece siempre tu compañía y opinión. Este blog sería un algo en la nada sin comentarios.
Gracias

Y vueltas y vueltas…

            Te movías al son de océanos de agua cristalina; yo te observaba con la mirada de quien bajo un asombro temporal, atisbaba un fin...